Un plato irresistible para quienes disfrutan de las carnes tiernas y jugosas con un toque ahumado y caramelizado. Un corte ideal para cocinar a la parrilla, al horno o incluso en una olla de cocción lenta.
Ya sea en una reunión, una fiesta de fin de año o una celebración especial, el lechón asado es siempre protagonista de un ritual que combina el sabor inconfundible de la carne con el arte del asador.
El lomo es uno de los cortes más tiernos y preciados. Suave, magro y de sabor delicado, es ideal para quienes buscan una carne que prácticamente se corta sola.
La costumbre de cocinar vegetales a la parrilla dio lugar a este plato para aprovechar las brasas y realzar los sabores de las verduras con un toque ahumado.
Un infaltable en cualquier asado o comida al aire libre, ideal para compartir. La combinación de piel crocante, carne jugosa y un toque ahumado lo hace irresistible.