Una nave espacial soviética robótica lleva 53 años a la deriva en el espacio.
Regresará a la Tierra a finales de esta semana.
El Kosmos-482 se lanzó en marzo de 1972.
Si todo hubiera salido bien, habría aterrizado en la sofocante superficie de Venus y se habría convertido en la novena misión soviética Venera sin tripulación al planeta.
Sin embargo, una avería en el cohete lo dejó varado en la órbita terrestre.
Desde entonces, el Kosmos-482 ha estado regresando lentamente en espiral a nuestro planeta.
“Es este artefacto que debía ir a Venus hace 50 años y estuvo perdido y olvidado durante medio siglo”, dijo Jonathan McDowell, astrónomo del Centro de Astrofísica Harvard & Smithsonian, quien mantiene un catálogo público de objetos espaciales.
“Y ahora le tocará entrar en la atmósfera, aunque en el planeta equivocado”.
Protegida por un escudo térmico, la nave espacial, con un peso aproximado de 470 kilos, fue diseñada para sobrevivir a su inmersión en la tóxica atmósfera venusina.
Esto significa que hay buenas probabilidades de que sobreviva a esta inmersión y pueda llegar a la superficie al menos parcialmente intacta.
Aun así, el riesgo de que haya lesiones en tierra es bajo.
"No estoy preocupado; no les voy a decir a todos mis amigos que se vayan al sótano por esto", dijo Darren McKnight, investigador técnico sénior de LeoLabs, una empresa que rastrea objetos en órbita y monitorea Kosmos-482 seis veces al día.
"Normalmente, aproximadamente una vez a la semana, un objeto grande reingresa a la atmósfera terrestre, donde algunos restos sobreviven hasta la superficie".

¿Cuándo regresará Kosmos-482 a la Tierra?
as estimaciones cambian a diario, pero actualmente se prevé que el reingreso sea viernes o sábado.
The New York Times publicará estimaciones actualizadas a medida que se revisen.
Un cálculo de la ventana realizado por The Aerospace Corp., una organización sin fines de lucro apoyada por el gobierno federal que rastrea los desechos espaciales, sugiere las 11:37 pm, hora del Este, el viernes, más o menos 16 horas.
Marco Langbroek, científico y rastreador de satélites de la Universidad Tecnológica de Delft en Países Bajos que ha rastreado a Kosmos-482 durante años, sitúa la estimación más cerca de las 3:51 am hora del Este del sábado, más o menos unas 20 horas.
¿Dónde está la nave espacial ahora?
Se desconoce por dónde entrará la nave espacial en la atmósfera.
Sin embargo, su ubicación sobre la Tierra puede calcularse utilizando datos orbitales publicados periódicamente por el Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte y distribuidos por sitios web como CelesTrak.
Una vez que la sonda empieza a rozar la atmósfera, esos cálculos se vuelven poco fiables.
¿Donde aterrizará?
Nadie lo sabe.
«Y no lo sabremos hasta después del hecho», dijo McDowell.
Esto se debe a que Kosmos-482 se desplaza por el espacio a más de 27.000 km/h, y seguirá así hasta que la fricción atmosférica frene la sonda.
Por lo tanto, un error de sincronización, incluso de media hora, significa que la nave espacial reingresará a más de medio mundo de distancia, en un lugar diferente.
Lo que se sabe es que la órbita de Kosmos-482 lo sitúa entre los 52 grados de latitud norte y los 52 grados de latitud sur, lo que cubre África, Australia, la mayor parte de América y gran parte de las latitudes sur y medias de Europa y Asia.
“Hay tres cosas que pueden suceder cuando algo vuelve a entrar:
un chapoteo, un golpe sordo o un ¡ay!”, dijo McKnight.
"Un chapoteo es realmente bueno", dijo, y probablemente sea así porque gran parte de la Tierra está cubierta de océanos.
Añadió que la esperanza era evitar el "golpe sordo" o el "ay".
¿Sobrevivirá la nave espacial al impacto?
Suponiendo que Kosmos-482 sobreviva a la reentrada —y debería, siempre que su escudo térmico esté intacto—, la nave espacial viajará a unos 240 km/h cuando se estrelle contra lo que sea que choque, calculó Langbroek.
"No creo que quede mucho después", dijo McDowell.
"Imagina estrellar tu coche contra una pared a 240 km/h y ver cuánto queda".
El calor del reingreso debería hacer que Kosmos-482 sea visible como una raya brillante en el cielo si su regreso ocurre sobre un área poblada durante la noche.
Si se logran recuperar partes de la nave espacial, legalmente pertenecerán a Rusia.
“Según la ley, si se encuentra algo, se tiene la obligación de devolverlo”, declaró Michelle Hanlon, directora ejecutiva del Centro de Derecho Aeronáutico y Espacial de la Universidad de Misisipi.
“Rusia se considera el propietario registrado y, por lo tanto, mantiene la jurisdicción y el control sobre el objeto”.
¿Cómo sabemos la identidad de este objeto?
Hace unos 25 años, McDowell revisaba el catálogo de NORAD, compuesto por aproximadamente 25.000 objetos orbitales, e intentaba identificar a cada uno.
"En la mayoría de los casos, la respuesta es:
'Bueno, esto es un fragmento de cohete detonado de algo bastante aburrido'", recuerda.
Pero uno de ellos, el objeto 6073, era un tanto peculiar.
Lanzado en 1972 desde Kazajistán, terminó en una órbita muy elíptica, viajando entre 200 y 9.600 kilómetros de la Tierra.
Al estudiar su órbita y tamaño, McDowell supuso que debía tratarse del módulo de aterrizaje Kosmos-482, no solo de los restos del lanzamiento fallido.
Esta conclusión fue respaldada por múltiples observaciones desde tierra, así como por un documento soviético recientemente desclasificado.
c.2025 The New York Times Company
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