Ni por estos días de buenos resultados deportivos reina la paz en uno de los vestuarios más célebres del fútbol mundial: el del Real Madrid. Según el periódico español Mundo Deportivo, el principal apuntado hoy es Isco Alarcón, debido a sus reiteradas lesiones y “milagrosas” recuperaciones.
“Se borra para no jugar”, es la frase que corre en un plantel que este jueves recibe al Getafe con la gran chance de escaparse a cuatro puntos del Barsa y encaminarse hacia el título. Isco fue titular en 12 partidos durante La Liga y en todos salió.
Disputó 1.387 minutos en lo que va del torneo, pero se perdió nueve encuentros (por lesiones musculares y una lumbalgia) y su última dolencia y “fugaz” recuperación habría sido la que hizo estallar el conflicto: el 17 de junio, sufrió una “lesión isquiotibial del muslo derecho” en un entrenamiento y supuestamente iba a ser baja tres semanas, pero sólo tardó seis días en volver.
Se sabe: en ese vestuario del Madrid nunca faltaron las polémicas, las piñas, las camarillas y hasta las camas a los DT. A continuación algunas de las historias más famosas.

Si hubo una plantilla llena de divos en el Merengue fue aquella de los Galácticos: Casillas, Roberto Carlos, Figo, Beckham, Zidane, Raúl, Ronaldo...
El año pasado, el brasileño Roberto Carlos, uno de los mejores laterales de la historia del fútbol, llegó a confesar en una entrevista al medio portugués Canal 11 cómo se cargaron, por ejemplo, a su compatriota, el entrenador Vanderlei Luxemburgo. “Nosotros teníamos la costumbre, antes de la cena, de tomar nuestra cerveza y vino. Con Ronaldo le dijimos a Luxemburgo que no quitara las botellas de vino porque en ese caso tendría problemas. Las quitó. Y duró tres meses”.

José Antonio Camacho fue otro entrenador que aguantó poco en el Real Madrid: en 2004, duró apenas tres partidos. Cuentan que este técnico tenía lo loca idea de hacer los entrenamientos temprano, algo que muchas de aquellas figuras no toleraban.

En esa misma nota, Roberto Carlos revela que con Vicente Del Bosque, que dirigió al equipo entre 1999 y 2003, sí era todo más fácil. ¿Por qué">