Libertad potencia la crisis de Talleres. El equipo paraguayo, que venía de vencer en la fecha inaugural a Alianza Lima y que luego se había impuesto en el clásico ante Cerro Porteño, se llevó un premio a la eficacia y marcha con puntaje ideal en el grupo D de la Copa Libertadores. Venció 2-0 al conjunto cordobés, que a pesar de sus buenas intenciones y del envión que le dio la victoria del último fin de semana ante Gimnasia y Esgrima de La Plata volvió a perder y complica su clasificación a octavos de final.
Talleres tuvo la actitud para ir a buscar desde el arranque la victoria, una necesidad después de la derrota de la semana pasada ante San Pablo en el estadio Mario Alberto Kempes. Se plantó con sus diez jugadores de campo en terreno rival, con Ulises Ortegoza como el punto de partida de cada una de sus jugadas de ataque y con el talentoso Bebelo Reynoso, desquilibrante por la derecha, como su carta más peligrosa.
Sin embargo, nunca a lo largo de los primeros 45 minutos logró quebrar la resistencia de Libertad, que se plantó con dos líneas de cuatro bien juntas y justificó porqué es el equipo con menos goles recibidos en la Primera de Paraguay. La más clara la tuvo Ortegoza con un potente remate de media distancia que se estrelló contra el travesaño.
Al local, en tanto, le bastó con un único disparo al arco para ponerse en ventaja. El 1-0 llegó a los 11 minutos de juego después de una jugada preparada que definió Iván Franco. De tiro libre, Iván Ramírez lo encontró libre en la izquierda a Lorenzo Melgarejo cuando todos miraban al área y éste jugó al centro del área, donde estaba Franco para anticiparse a la salida de Guido Herrera y abrir el marcador. En primera instancia, el tanto fue anulado por fuera de juego, pero la intervención de los jueces del VAR permitió convalidarlo.
El comienzo del complemento fue una continuación de lo visto en la primera parte. La posesión de la pelota y las ocasiones de gol fueron para Talleres, pero pecó de ineficaz nuevamente y lo pagó caro.
A los nueve minutos de la etapa final, Nahuel Bustos, volcado en la izquierda en posición de extremo en el 4-3-3 que planteó Guiñazú, recibió la pelota y sacó un violento remate que obligó a una gran atajada de Rodrigo Morinigo. La pelota se le metía en el ángulo al arquero paraguayo y esa acción le daba otro aire a la T, que hace rato no pateaba al arco. Pero tres minutos después recibió un duro golpe: en la segunda jugada de peligro, Libertad llegó al 2-0. Adrián Alcaraz, ingresado unos minutos antes, se escapó en velocidad por la izquierda y de contragolpe marcó el segundo gol del partido en la primera pelota que tocó.
Talleres no se desconectó del partido y tuvo sus ocasiones para marcar el descuento e ilusionarse con una remontada, pero falló una y otra vez de cara al arco rival. Una de las más claras fue para Gastón Benavidez, el lateral derecho que apareció libre por ese sector cuando la jugada venía por el lado opuesto y desvió su remate. Luego, Federico Girotti, ingresado por Cristian Tarragona, se lo perdió de cabeza. Mientras tanto, Guiñazú se agarraba la cabeza en el banco. Y Camilo Portilla lo tuvo con un remate de media distancia.
Afuera de la zona de clasificación en el Torneo Apertura y sin puntos en la Libertadores, Talleres no sale de la crisis. El próximo domingo visitará a River en el Monumental, luego recibirá a Vélez y después viajará a Perú para jugar con Alianza Lima. Tres partidos decisivos para salvar el año.
Talleres se complica en la Copa Libertadores. Foto: @Libertad_Guma